En Roma, el Papa lava los pies a 12 jóvenes presos
El Papa Francisco, sensible al mundo carcelario, celebró la tradicional Misa del Jueves Santo lavando los pies a 12 jóvenes presos en una cárcel de menores en Roma.
El jesuita argentino, hospitalizado la semana pasada por una bronquitis, acudió el jueves por la tarde a la prisión de Casal del Marmo, en el norte de la capital italiana, donde ya había realizado este rito en 2013 tras su elección.
Con un bastón, Jorge Bergoglio, que apareció sonriente, se paró frente a cada uno de los 12 jóvenes detenidos -incluidas dos mujeres- para lavarles los pies antes de agacharse para besarlos. Algunos le devolvieron el beso en la mano, otros intercambiaron algunas palabras con él.
“Espero poder salir de esta porque no puedo caminar muy bien”, bromeó el Papa de 86 años en una breve homilía improvisada, en alusión a su movilidad complicada por el dolor de rodilla que lo obliga a moverse en silla de ruedas. .
Entre los jóvenes había un senegalés, un rumano, un croata y un joven de origen ruso.
En la tradición cristiana, el Jueves Santo conmemora el día en que Cristo lava los pies a los apóstoles e instituye la Eucaristía en su última comida (la Última Cena). El ritual se ha perpetuado en el cristianismo, excepto en algunas ramas del protestantismo.
Es un punto culminante de la Semana Santa que conmemora los últimos días de Cristo y precede a la Pascua.
Desde el inicio de su pontificado, el Papa Francisco ha decidido descentralizar esta celebración fuera del Vaticano. En los últimos años ha visitado en repetidas ocasiones cárceles o centros de acogida de refugiados, lavando los pies a ex mafiosos, enfermos o incluso creyentes de otras religiones.
En la mañana de este jueves, el papa Francisco presidió la tradicional misa "crismal" en la basílica de San Pedro, que da lugar a la bendición del óleo santo que se utiliza en la celebración de determinados sacramentos a lo largo del año.
El Consejo Editorial (con AFP)
