
Los obispos católicos reiteraron su oposición a una posible enmienda legislativa hacia una "legitimación de la eutanasia o el suicidio asistido", abogando por una mejor "gestión de la dependencia por vejez", este martes en Lourdes.
En una declaración solemne publicada con motivo de su asamblea plenaria en Lourdes, el episcopado llama a una "verdadera dinámica paliativa, hecha de atención a cada persona en su unidad y con su entorno", juzgando que los cuidados paliativos han conocido un desarrollo que es ciertamente "significativo" pero "todavía insuficiente".
"Oímos a muchos cuidadores afirmar con fuerza que la mano que cuida de ninguna manera puede ser la que da la muerte+. Oímos a muchos observadores de nuestra sociedad, con diversas opiniones filosóficas y afiliaciones religiosas, advertir contra el mandato de renunciar a la vida que pesaría sobre personas frágiles la facilidad jurídica y económica de la asistencia activa al morir"
“Oímos la revuelta, la ira, el sentimiento de injusticia que resuenan ante el sufrimiento y la muerte como llamados a una mayor fraternidad y como búsqueda de esperanza (…), pero en ningún caso como legitimación de la eutanasia o asistida”. suicidio"
C'est pourquoi l'épiscopat appelle à ce que "le débat en cours sur la fin de vie constitue l'occasion positive d'un progrès significatif de l'accompagnement et de la prise en charge notamment de la dépendance due au grand âge dans nuestro país". La liberté "ne peut se déployer que si la valeur de la vie de chacun est pleinement reconnue et respectée. C'est dans ce cadre protecteur qu'il convient de mettre en œuvre tous les chemins possibles d'aide active à vivre", concluent -ellos.
Una "convención ciudadana", que reunió a miembros sorteados, trabajó en estos temas durante varios meses y debe emitir una opinión a principios de abril destinada a asesorar al gobierno.
Escribiendo con AFP