
El Papa Francisco recorrerá una avenida de Marsella (sur), la segunda ciudad de Francia, en un "papamóvil" el 23 de septiembre antes de una misa, durante una visita dedicada a las migraciones, anunciaron el domingo el ayuntamiento y la diócesis.
La cuestión migratoria estará en el centro de esta visita papal a Marsella, puerto emblemático en la historia de los flujos de población hacia Europa, con un homenaje en particular a los inmigrantes y al sufrimiento que soportan en su búsqueda de una vida mejor.
Las muertes de migrantes en el Mediterráneo son una “herida abierta en nuestra humanidad”, dijo el Papa Francisco a mediados de agosto, después de una serie de naufragios mortales.
Más de 1.800 de estas víctimas perecieron en el Mediterráneo central, entre el norte de África e Italia, la ruta migratoria más mortífera del mundo.
La diócesis de Marsella organiza del 17 al 24 de septiembre encuentros sobre los temas de las migraciones y el cambio climático, a los que el Papa está invitado a reunirse con obispos y jóvenes.
El Papa llegará el viernes 22 de septiembre y partirá al día siguiente. En esta ocasión también se reunirá con el presidente Emmanuel Macron.
"El Papa recorrerá la avenida del Prado para encontrarse con los vecinos que lo deseen", indicaron el ayuntamiento y la diócesis en un comunicado de prensa conjunto.
El principio de este recorrido por una de las principales avenidas de Marsella nació de la "locura" suscitada por la visita de Francisco con motivo de los Encuentros del Mediterráneo, según el arzobispo de Marsella, el cardenal Jean-Marc Aveline.
“Rápidamente nos dimos cuenta de que muchas solicitudes de plazas no podían satisfacerse” para la misa en el Vélodrome, explicó en el comunicado. Se espera que haya cerca de 60.000 asientos disponibles en el estadio que habitualmente acoge los partidos de fútbol del Olympique de Marsella.
En Marsella, también conocida por su violencia urbana, el papel de las redes sociales se destaca en el tráfico de drogas, con jóvenes reclutados en toda Francia a través de Snapchat, que vienen a arriesgar su vida en puntos de venta, atraídos por el espejismo del dinero fácil.
También circulan vídeos de tiroteos, mientras que más de veinte personas ya han muerto en actos de violencia relacionados con el narcotráfico desde enero.
La última visita de un Papa a Marsella, ciudad marcada por las migraciones, se remonta a hace casi 500 años, en 1533.
El Consejo Editorial (con AFP)