
Desde el comienzo de su carrera como actor de teatro, hace unos diez años, David Sautel ha intentado nunca traicionar su fe en cada una de sus elecciones. Entre sacrificios y hermosos encuentros, cuenta cómo ve su trabajo como una oportunidad para testimoniar.
La fe y el teatro son dos cosas inseparables en la vida de David. Primero, porque el hombre de 33 años tiene dos trabajos, el de pastor y el de actor. Entonces porque estas dos historias de amor comenzaron al mismo tiempo, cuando él solo estaba en la universidad.
“Fue un período en el que me acosaban”, recuerda el sureño, originario de la Costa Azul.
“Necesitaba comodidad y una salida. Luego me acerqué a Dios y comencé a actuar”.
Dilema
Unos años más tarde, mientras realizaba una obra de teatro con su compañía universitaria, David se encuentra por primera vez en una situación incómoda, donde su conciencia lo inquieta.
“Estaba interpretando una escena en la que nos burlábamos de Cristo”, explica. Incómodo, se encuentra entonces frente a un dilema:
"Me dije: o me callo o me atrevo a decir lo que siento. Y encontré el coraje para hablar".
Un cargo que, para su gran asombro, será bien recibido por sus socios y su director. Ante los argumentos de David, sobre su conciencia pero también sobre ciertas "habilidades de escritura" que señala, este último decide no quedarse con la escena.
“Además, fue este maestro quien posteriormente abrió las puertas al mundo profesional, grandes comparsas y giras…”, dice David agradecido. Un mundo profesional en el que intentará asumir siempre su fe, e incluso dar testimonio de ella.
"Mostrar quienes somos"
"Se ha vuelto bastante natural decir la verdad", sonríe David. Sobre todo porque desde 2016 presenta un programa de televisión sobre el tema de la fe cristiana.
"De repente, la gente de la zona se da cuenta. Y me presentan cada vez más como el cristiano de la tropa. ¡Pero con mucha benevolencia!".
Una fe que suscita muchos interrogantes entre sus colegas. “Muchas veces me hacen preguntas y estoy encantado de contarles esta Buena Noticia en la que creo”, explica el actor, que elogia de paso la apertura de espíritu que reina en medio del teatro.
“La gente es curiosa y tiene una sensibilidad inmensa. Conocí a mucha gente que me dio verdaderas lecciones de vida. Una empresa, por ejemplo, que acogía voluntariamente a refugiados”, recuerda.
Con su Iglesia, David también había organizado una colecta para proveerles de materiales.
“Fue una oportunidad para mostrar quiénes somos. Porque es cierto que hay pocos creyentes en este ambiente. Pero muchos no tienen nada en contra de los cristianos, simplemente se oponen a las instituciones religiosas”.
un Dios fiel
Por eso hoy, David desea inspirar a todos aquellos que se desenvuelven en ambientes donde a veces es difícil asumir su fe. Aconsejándoles que se fortalezcan, que se rodeen bien para estar listos para decir que no y marcar la diferencia, cuando sea necesario.
“Sé por experiencia que Dios es fiel”, se regocija el pastor cómico, que recuerda el momento en que rechazó una gran gira porque ya estaba involucrado en un proyecto de la Iglesia.
Fue un gran sacrificio. Sin embargo, me di cuenta más tarde, mirando hacia atrás, que Dios me había abierto puertas increíbles debido a eso. Era exactamente lo que tenía que hacer”, se regocija. Antes de terminar con el verso que lo acompaña cada día:
"¡Busca primero el reino y la justicia de Dios!" (Mateo 6:33)
Theo Lombardo