
El Papa Francisco lamentó el miércoles la "falta de rutas de paz valientes" en Europa para poner fin a la guerra en Ucrania, recordando al Viejo Continente su papel como "constructor de puentes" al comienzo de una visita de cinco días a Portugal.
“Mirando con cariño a Europa y al espíritu de diálogo que la caracteriza, uno podría preguntarle: ¿hacia dónde navegas, si no propones rutas de paz, caminos creativos para terminar la guerra en Ucrania (…)?”. , lanzó el Papa de 86 años durante su primer discurso ante las autoridades y el cuerpo diplomático en el centro cultural de Belém.
“Navegamos en el océano de la historia en tiempos convulsos y sentimos la falta de rutas valientes de paz”, lamentó el jesuita argentino, quien ha llamado constantemente al silenciamiento de las armas en Ucrania desde el inicio de la invasión rusa en febrero. 2022.
En una ciudad donde están "grabados" los hitos para el progreso de la comunidad europea, en particular la firma del Tratado de Lisboa en 2007, François recordó el "sueño europeo de un multilateralismo más amplio que el mero contexto occidental" para "aprovechar los más mínimos signos de relajación y leer entre las líneas más retorcidas".
"Europa, la verdadera, necesita el mundo: necesita su papel de constructora de puentes y de pacificadora en su parte oriental, en el Mediterráneo, en África y en Oriente Medio", ha remachado.
Fiel a los ejes temáticos de su pontificado, iniciado en 2013, el Papa se ha pronunciado contra las lacras que cree debilitan a Occidente, como las políticas migratorias, la crisis demográfica, la eutanasia o el comercio de armas.
"¿Hacia dónde navegas, Europa y Occidente, con el rechazo a los ancianos, los muros con alambre de púas, las tragedias en el mar y las cunas vacías? ¿Adónde vas si, ante el dolor de vivir, te ofrecer remedios apresurados y erróneos, como el acceso fácil a la muerte, una solución fácil que parece dulce, pero que en realidad es más amarga que las aguas del mar?”, aseveró.
"Y estoy pensando en tantas leyes sofisticadas sobre la eutanasia", añadió cuando Portugal adoptó en mayo una ley que rige la "muerte médicamente asistida", uniéndose así al puñado de países europeos que han legalizado la eutanasia o el suicidio asistido, con los del Benelux o países vecinos. España.
Sensible a la cuestión de la ecología, François también abordó el desafío del calentamiento global, mientras el planeta acaba de experimentar el mes de julio más caluroso jamás medido.
"Los océanos se recalientan y, desde sus profundidades, sale a la superficie la fealdad con la que hemos contaminado la casa común. Estamos convirtiendo estas grandes reservas de vida en vertederos de plástico", lamentó.
El Consejo Editorial (con AFP)